especialista se refiere a dos falsas creencias sobre la morfina: que crea adicción y que su empleo está indicado solo en pacientes en fase terminal. “La morfina y sus derivados no crean adicción si se utilizan correctamente. Durante el tratamiento hay que hacer ajustes en las dosis, con bastante frecuencia a lo largo del proceso, para ir controlando de forma eficaz el dolor, y siempre bajo indicación del médico o de la enfermera”, señala el Dr Lama, destacando también que “no es cierto que se utilicen solo en los pacientes terminales, ya que estos fármacos son muy buenos analgésicos para el dolor oncológico y crónico, como por ejemplo el dolor óseo provocado por la artrosis”.
Las referencias más antiguas que se tienen del calzado datan del año 10,000 a.C, pinturas en cuevas encontradas en países como España y Francia, fueron algunas de las primeras evidencias que dejaron entrever un poco de la historia del mismo. El factor clima se convirtió en el primer diseñador, en países de temperaturas frías los mocasines comenzaron a surgir como una forma de protección, mientras que las sandalias hechas de paja o papiro eran utilizadas por los nobles en lugares como Egipto.
Si bien todos sabemos que seguir una dieta rica en vegetales y alimentos integrales tiene un efecto positivo tanto en nuestra salud física como psicológica, excederse con algo, por más bueno que sea, puede tener consecuencias negativas. De hecho, obsesionarse con comer sano puede provocar aislamiento social, trastornos psicológicos y hasta la muerte.
Existen adicciones a sustancias y de comportamiento. Todas comparten el mismo proceso de evolución y una sintomatología. La adicción más frecuente es la relacionada con el abuso de drogas, pero las consecuencias pueden tener un impacto parecido a cuando se abusa de comportamientos como el uso de internet, el sexo y el amor, la comida, el ejercicio físico, el juego, las compras, o cualquier otro comportamiento compulsivo que se convierta en obsesión y descontrole la vida del afectado.
«Comida chatarra» es un término global, y que más o menos engloba todo lo que añade calorías, grasa y azúcar con pocos nutrientes para compensarlo. La soda o gaseosa es una gran culpable, al igual que los aperitivos salados, muchos productos horneados preparados de forma tradicional, comida rápida, alimentos envasados??… la lista sigue y sigue.
En total, considerando que pueden variar de una cepa a otra, hay más de 1.000 proteínas adicionales que en el fondo, tienen el objetivo de proteger al grano de todo tipo de patógenos y generar resistencia al agua. Existen aglutininas, peroxidasas, alfa-amilasas, serpinas y acil-CoA oxidasas, además de cinco formas de gliceraldehído-3-fosfato deshidrogenasas. Es por esa razón que no debemos fijarnos solo en el gluten “y obsesionarnos” con él, sino que también debemos tener en cuenta el resto de proteínas presentes en el trigo.
Los consumidores pueden delirar que tiene hormigas corriendo por su piel, contó una especialista en Ciencias Médicas. Confesó que con una sola dosis el consumidor puede alucinar, y volverse adicto. Les da mucha sed, pierden el sueño y el apetito también. En Guanajuato se registraron 70 mil adictos a sustancias psicotrópicas en el 2019, la mayoría son dependientes de esta droga
Los esteroides son iguales o similares a ciertas hormonas del cuerpo. El cuerpo produce esteroides de manera natural para facilitar algunas funciones como combatir el estrés y promover el crecimiento y el desarrollo. Pero algunas personas usan esteroides en forma de píldoras, geles, cremas o inyecciones porque creen que estos pueden mejorar su rendimiento deportivo o su aspecto físico. Los esteroides anabólicos son hormonas producidas artificialmente y son iguales o similares a los andrógenos, las hormonas masculinas del cuerpo. Existen más de 100 variantes de esteroides anabólicos. El andrógeno más potente es la testosterona.
Existen adicciones a sustancias y de comportamiento. Todas comparten el mismo proceso de evolución y una sintomatología. La adicción más frecuente es la relacionada con el abuso de drogas, pero las consecuencias pueden tener un impacto parecido a cuando se abusa de comportamientos como el uso de internet, el sexo y el amor, la comida, el ejercicio físico, el juego, las compras, o cualquier otro comportamiento compulsivo que se convierta en obsesión y descontrole la vida del afectado.
La ansiedad, la depresión o el estrés se han convertido en estos tiempos hiperactivos en modos habituales de vida. Y nos hemos habituado a ellos rápidamente, aunque no tiene tanto tiempo que se vienen produciendo. Tal es así que a los hispanohablantes no nos ha dado tiempo a inventar una palabra que traduzca el término anglosajón: “stress”.
|