Con participación

 “Susy” es madre de un joven de menos de 20 años. Este ha tenido problemas de adicción a la marihuana; Susy nunca sospechó que en el círculo cercano de su hijo tuvieran contacto con esta droga y mucho menos que él la consumiera. Se dio cuenta hasta ver que su hijo mostraba depresión y ansiedad, síntomas derivados del consumo de marihuana.

Susy no está de acuerdo con la legalización de la marihuana por la experiencia que vivió su hijo. Ella comenta que quizá el gobierno cree que somos “débiles y tontos” y por eso pretende legalizarla. Susy dice que los jóvenes que se drogan “es como si estuvieran dormidos ante la vida”, señala. Además, expresa que si hoy el consumo de marihuana es abundante, con la legalización será mucho peor y jóvenes que no se atrevían a consumirla ahora lo podrán hacer con mayor facilidad, porque aunque sus papás les prohíban el consumo de esa droga, el gobierno sí se los permitiría a partir de los 18 años. Susy comenta: “Muchísimos chavos amigos de mi hijo ‘marihuanean’ pero los padres no quieren verlo, porque piensan que sus hijos nunca lo harán”.

Susy nos dice que a veces los problemas que enfrenta la juventud son difíciles y la marihuana, lejos de ayudarles a sentirse mejor como los jóvenes piensan, les crea problemas que antes no tenían. Por ejemplo, ella dice: “Yo tuve algunos problemas de salud y fue difícil para mi hijo, quien aunque había dejado de consumir marihuana, lo volvió a hacer”. También comenta que su hijo tuvo que abandonar los estudios porque no podía con las clases y tareas al ser consumidor de marihuana. Susy dice que su hijo “buscó evadir su realidad con la droga”.

Ella comenta que la adicción siempre está presente, porque aunque un hijo deje de fumar marihuana, puede recaer. También nos dice que generalmente, quienes consumen marihuana buscan otro tipo de drogas ya que ella ha visto que amigos de su hijo ahora consumen también LSD. Un maestro de su hijo le mencionó que era un alumno brillante pero que sacaba calificaciones bajas porque siempre llegaba tarde o lo notaba cansado. Incluso Susy cuenta que en el colegio donde estaba su hijo, algunos chicos fumaban marihuana durante el descanso porque el colegio tenía un patio muy grande y los maestros no se daban cuenta según le llegó a comentar su hijo. Susy señala que los papás de los jóvenes a veces piensan que sus hijos nunca van a caer en drogas y no alcanzan a ver la realidad.

 

 

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