Dependencia emocional: mi experiencia y cómo lo superé
Cómo me sentía y qué significaba para mí Desde mi experiencia, la dependencia emocional me ha supuesto muchas crisis con mi pareja. No sabía lo podían sentir las personas dependientes hasta que sentí la necesidad de estar siempre en contacto con él. En ocasiones no contar con su atención suponía para mí angustia y ansiedad. Tenía que organizar toda mi rutina y lo que haría próximamente para asegurarme de que en algún momento del día mi pareja me dedicaría tiempo y estaría tranquila con él. Esto en ocasiones, por trabajo y horarios, no era posible y originaba en mí tristeza. Pensaba que quizás no ponía interés en verme y que realmente no quería estar conmigo.Aparecían muchos pensamientos negativos en mi cabeza, que acababan en peleas y discusiones con mi pareja, desgastando poco a poco nuestra relación. Necesitaba tener constantemente gestos por su parte, ya fuera un beso, un abrazo o alguna muestra de cariño. Y aunque él lo hacía, yo seguía con la sensación de falta de afecto por su parte.Al sentir que él no me prestaba la atención que yo demandaba intentaba "salvar" nuestra relación comprándole cosas para que él estuviera feliz conmigo. Sin darme cuenta de que él no necesitaba eso para quererme más. Tenía la sensación de que no llegaba a ser feliz del todo porque no recibía lo que le pedía. Sin embargo no me imaginaba estar sin él, lo cual generaba en mí la sensación de no saber cómo actuar.Me pasaba días tristes dándole vueltas a mis pensamientos sobre la relación y, por supuesto, esto me afectaba en el estado anímico y en la forma en la que a veces le trataba. En algunas ocasiones le decía que quería dejarlo, pero me daba cuenta de que necesitaba estar con él a los pocos días, por lo que acabábamos volviendo. ¿Cuándo supe que tenía dependencia emocional? Fue en uno de esos días en los que me sentí vacía sin su atención cuando lo comprendí. El problema era mío y no suyo. Él tenía detalles y gestos de cariño conmigo, pero yo no los valoraba y le exigía más. Fue entonces cuando comprendí que necesitaba terapia de pareja para afrontar estos problemas, ya que tenía que evitar la situación de amor tóxico en la que me encontraba. Gracias a Internet, encontré un psicólogo online y me puse en contacto para que me ayudara a mejorar la relación con mi pareja y conmigo misma.Aquí puedes hacer un test de dependencia emocional para descubrir en qué punto te encuentras. Lo que aprendí gracias a la terapia Para superar la dependencia emocional decidí acudir a terapia online. Durante la terapia fui consciente de cómo la dependencia emocional había convertido mi relación en una de las relaciones tóxicas que yo criticaba cuando lo veía desde fuera. Uno de los pasos para eliminar la dependencia emocional que sufría hacia mi pareja fue aumentar mi autoestima. Aprendí a no basar mi felicidad y mi estado de ánimo en otras personas, sino en mí misma.Comprendí que debía aprender a estar sola, a realizar actividades que me gustaran y desarrollar nuevas habilidades para terminar con el miedo al abandono. Comencé a quererme a mí misma primero, para que mi pareja pudiera hacerlo mejor. Por supuesto, esto hizo mejorar mi relación de pareja. Cada uno debe conservar su individualidad para que una relación sea sana y equilibrada.Aprendí a amar esos momentos de soledad para mimarme y cuidarme. Me dedicaba el tiempo que antes quería dedicarle solo a él. Además, cambié mis creencias sobre el amor idealizado por uno más real. Ahora soy menos demandante y comprendo más a mi pareja, acepto su forma de ser como él acepta la mía.Gracias a la terapia he comprendido qué es la dependencia emocional y cómo superarla. He comenzado a disfrutar de mi relación y de mi pareja. Y también de las personas que me rodean, como mis amigos. A los que anteriormente había dejado más de lado por centrarme tanto en mi novio. Es necesario tratar este problema que nos afecta a muchos para comenzar a ser felices de verdad. Mi felicidad no se basa en una sola persona, esa persona complementa mi vida, pero es solo una parte.Una vez que aprendes a construir tu vida por ti misma, a alcanzar tus propias metas y a confiar en tus posibilidades, comprendes que no necesitas la aprobación de las demás personas. Animo a todos los que sienten que tienen una fuerte dependencia emocional con sus parejas, familiares o amigos a comprender que hay algo más allá y que la felicidad empieza por nosotros mismos.