06 de octubre del 2020
Elegir el perfume adecuado es divertido, una tarea reconfortante e incluso, un hobby tan entretenido como cualquier otro. Pero los excesos no son buenos en ninguna circunstancia y, por eso, hoy recopilo para ti estas 7 señales de que los perfumes son tu obsesión.
Si te identificas con ellas… ¡cuidado! Tu atracción por las fragancias está al límite.
#7 Tu colección es enorme
Muebles, estanterías y rincones de todo tu hogar están llenos de perfumes: sí, tu colección es inmensa. No puedes parar de sonreír cada vez que miras tus frascos y más parece el laboratorio de un alquimista que un hogar cualquiera. Además… ¡disfrutas como una niña cuando tienes que ordenar la colección!
No se te escapa una. Sabes quién y cuándo sacará un nuevo perfume y alucinas, con cualquier publicidad que anuncie un nuevo lanzamiento.
#5 Los vendedores te conocen
Has dejado de ser una compradora anónima para convertirte en una clienta tan habitual que, los vendedores de tus tiendas de referencia ya conocen tu nombre.
#4 Identificas cada perfume solo con olerlo
No lo puedes evitar, conoces cada fragancia hasta el punto de que un simple rastro es suficiente para que identifiques la marca del perfume en cuestión. Tienes tendencia a aproximarte a quienes huelen bien pero quienes optan por perfumes que no te convencen pasan a formar parte de tu ‘black list’.
#3 No te pierdes ninguna muestra
Llevas años comprando revistas pero casi ni las miras. Tu única intención es hacerte con las muestras que habitualmente regalan estas publicaciones. Incluso, has llegado a cogerlas de la sala de espera de alguna consulta (tranquila, no eres la única).
#2 Perfumes evocadores
No solo identificas las marcas de los perfumes sino que muchos de ellos te resultan evocadores. Algunos son incluso capaces de trasladarte a otra época de tu vida, avivar sentimientos que creías enterrados y dibujar una sonrisa en tu rostro con solo olerlos.
#1 Tienes la fragancia perfecta para cada ocasión
Has acumulado tantos perfumes a lo largo de tu vida que tienes uno diferente para cada ocasión. Dispones de un abanico inmenso del que elegir en función del lugar al que vayas, el evento que tengas o la gente con la que te has citado.