11 de agosto del 2020
La anorexia nerviosa es uno de los trastornos de la conducta alimentaria más graves. Se caracteriza principalmente por una combinación de episodios de restricción de la alimentación, conocidos como anorexia, es decir, no ingerir alimentos o racionarlos al máximo.
También se pueden dar episodios de ingesta compulsiva y purgas para evitar el aumento de peso, lo que entendemos como bulimia. Estas conductas pueden incluir la provocación del vómito, el ejercicio físico excesivo y el uso de laxantes y diuréticos.
Normalmente, este trastorno tiende a aparecer entorno a los 17 años, mayormente en mujeres y estas personas acostumbran a tener los niveles del IMC (índice de masa corporal) bajos, en relación con variables como la edad, la altura y el peso, a causa de los malos hábitos alimenticios, lo cual es una situación de grave riesgo para su salud. En muchos casos es una enfermedad difícil de tratar debido a que mayormente las personas que los padecen no son conscientes y, por lo tanto, son reticentes a todo tipo de ayuda y de tratamiento profesional. Pero, obviamente, no es así en todos los casos, la colaboración conjunta tanto del propio paciente, su familia y los profesionales sanitarios puede dar unos buenos y exitosos resultados terapéuticos.
Siguiendo con el propósito de este artículo, a continuación expondremos 11 diferentes estrategias para la prevención de la anorexia que se pueden aplicar tanto con la población infantil como con la adolescente.
Es muy importante prevenir la anorexia desde la infancia. Tanto los padres o familiares como la escuela, pueden fomentar que desde esta etapa vayan integrando los alimentos saludables en su dieta, vayan estableciendo unos horarios de comida regulares para evitar que se salten las comidas, reducir el consumo de dulces y alimentos no saludables, etc.
Comer conjuntamente con los miembros de la familia, desde edades tempranas siempre que sea posible, para que este sea un espacio y un momento compartido cómodo y así mejorar la comunicación entre sus integrantes. De hecho, se recomienda que desde que los bebés empiezan la alimentación complementaria es mejor que coman en la mesa con su familia, tal como se explica en este artículo sobre la introducción de los alimentos sólidos en los bebés.
Tanto de niños como de adolescentes ya que, sentirse seguro/a consigo mismo/a, válido/a y competente hará que su autoconcepción y autoestima sea más alta y, por lo tanto, que se vean reducidas las probabilidades de sufrir anorexia. Aquí encontrarás actividades para fortalecer la autoestima en niños y niñas.
Practicar algún deporte que les motive y que se sientan a gusto es muy recomendable para promover unos hábitos y rutinas más saludables desde la infancia y para que su salud mental esté también equilibrada. Practicar deportes y hacer ejercicio son actividades para prevenir la anorexia.
Facilitar una comunicación fluida, empática y sana entre los miembros de la familia, para así poder recibir el apoyo y refuerzo necesario para hacer frente a las adversidades de la vida. En este artículo ofrecemos algunas claves para fomentar la unión en la familia.
Otra de las medidas para prevenir la anorexia es garantizar un buen descanso. Intentar que tanto niños/as como adolescentes cumplan con sus horarios de sueño habituales, ya que descansar y dormir las horas necesarias ayudará a que se sientan con más energía, más activos y se sentirán mejor física y psicológicamente.
Otra forma de prevención de la anorexia es practicar aficiones. Siempre que estas sean de su interés, hará que se sientan más a gusto con ellos/s mismos/as, más competentes y se fomentarán unas relaciones sociales sanas con sus iguales.
Desarrollar en ellos/as un pensamiento crítico en relación con los estereotipos de belleza tanto masculinos como femeninos. Se ha de intentar que vean la realidad tal y como es y aceptar y entender que todos los cuerpos son válidos y que la presión que nos provocan estos ideales transmitidos por los medios de comunicación pueden llegar a ser muy perjudiciales para nuestra salud. Por lo tanto, hemos de evitar las comparaciones y comentarios despectivos centrados en el físico entre las personas.
Otra medida para la prevención de la anorexia es la supervisión médica. No empezar ni poner en marcha dietas para perder peso que no estén supervisadas ni controladas por un profesional de la salud. Su médico o dietista le recomendará la dieta que más le convenga.
Llevar a cabo campañas de prevención y sensibilización en los centros educativos sobre la anorexia, dar información sobre sus síntomas y causas, puede ayudar a que los/las estudiantes tengan más conciencia sobre esta enfermedad y tengan más herramientas para poder identificarla y hacerle frente.
Informar a los educadores/as, profesores/as, madres y padres sobre los signos y síntomas de la anorexia es muy importante para que pueden detectar el trastorno a tiempo. Consultar inmediatamente un profesional de la salud es la mejor medida para coger a tiempo esta enfermedad, para así evitar complicaciones. Aquí puedes ver 20 consecuencias de la anorexia.
Es recomendable que todos estos consejos se pongan en marcha desde la infancia, para tener, desde un principio, integrados estos hábitos y así evitar que más adelante se desarrollen enfermedades relacionadas con la alimentación. También es interesante conocer las siguientes medidas de prevención de la bulimia nerviosa.