28 de febrero del 2020
DrugsFacts
Estos químicos se llaman cannabinoides porque son similares a los químicos que se encuentran en la planta de marihuana. Debido a esta similitud, los cannabinoides sintéticos a veces se llaman engañosamente "marihuana sintética" (o "hierba falsa"), y a menudo se comercializan como alternativas seguras y legales a esa droga. De hecho, no son seguros y pueden afectar el cerebro mucho más poderosamente que la marihuana; Sus efectos reales pueden ser impredecibles y, en algunos casos, más peligrosos o incluso mortales.
Los cannabinoides sintéticos son parte de un grupo de drogas llamadas nuevas sustancias psicoactivas (NPS). Los NPS son sustancias no reguladas que alteran la mente y que están disponibles recientemente en el mercado y están destinadas a producir los mismos efectos que las drogas ilegales. Algunas de estas sustancias pueden haber existido durante años, pero han reingresado al mercado en formas químicas alteradas o debido a una renovada popularidad.
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Los productos cannabinoides sintéticos a menudo están etiquetados como "no para consumo humano". Las etiquetas también a menudo afirman que contienen material "natural" tomado de una variedad de plantas. Sin embargo, las únicas partes de estos productos que son naturales son los materiales vegetales secos. Las pruebas químicas muestran que los ingredientes activos que alteran la mente son compuestos cannabinoides fabricados en laboratorios.
Los fabricantes venden estos productos en coloridos envases de aluminio y botellas de plástico para atraer a los consumidores. Comercializan estos productos bajo una amplia variedad de marcas específicas. Ahora existen cientos de marcas, incluidas K2, Spice, Joker, Black Mamba, Kush y Kronic.
Durante varios años, las mezclas de cannabinoides sintéticos han sido fáciles de comprar en tiendas de parafernalia de drogas, tiendas de novedades, estaciones de servicio y en Internet. Debido a que los químicos que se usan en ellos no tienen ningún beneficio médico y un alto potencial de abuso, las autoridades han prohibido la venta, compra o posesión de algunos de estos químicos. Sin embargo, los fabricantes intentan eludir estas leyes cambiando las fórmulas químicas en sus mezclas.
El fácil acceso y la creencia de que los productos de cannabinoides sintéticos son "naturales" y, por lo tanto, inofensivos, probablemente han contribuido a su uso entre los jóvenes. Otra razón para su uso continuado es que las pruebas de drogas estándar no pueden detectar fácilmente muchos de los productos químicos utilizados en estos productos.
¿Cómo usan las personas los cannabinoides sintéticos?
La forma más común de usar cannabinoides sintéticos es fumar el material vegetal seco. Los usuarios también mezclan el material vegetal rociado con marihuana o lo preparan como té. Otros usuarios compran productos cannabinoides sintéticos como líquidos para vaporizar en cigarrillos electrónicos.
¿Cómo afectan los cannabinoides sintéticos al cerebro?
Los cannabinoides sintéticos actúan sobre los mismos receptores de células cerebrales que el THC ( delta-9-tetrahidrocannabinol ), el ingrediente que altera la mente en la marihuana.
Hasta ahora, se han realizado pocos estudios científicos sobre los efectos de los cannabinoides sintéticos en el cerebro humano, pero los investigadores saben que algunos de ellos se unen más fuertemente que la marihuana a los receptores celulares afectados por el THC y pueden producir efectos mucho más fuertes. Los efectos sobre la salud resultantes pueden ser impredecibles y peligrosos.
Debido a que la composición química de muchos productos de cannabinoides sintéticos es desconocida y puede cambiar de un lote a otro, es probable que estos productos contengan sustancias que causen efectos dramáticamente diferentes de lo que el usuario podría esperar.
Los usuarios de cannabinoides sintéticos reportan algunos efectos similares a los producidos por la marihuana:
Los efectos psicóticos incluyen: