03 de April del 2019
Anónimo
La cocaína es una droga del grupo de las sustancias psicoactivas, es decir, que produce efectos estimulantes directos sobre el sistema nervioso central, principalmente sobre el cerebro. Entre sus características diferenciadoras está su alta capacidad de producir adicción, por lo que aun en pequeñas dosis puede generar una gran dependencia; otro de sus efectos es una rápida tolerancia a la dosis, por lo que se requiere consumir cada vez mayor cantidad para conseguir los mismos resultados, sin que el individuo sea consciente de que con ello se inicia el ciclo de toxicidad que acompaña la adicción a la cocaína
Se trata de una droga especialmente perniciosa para la salud, tanto física como mental, incluso en pequeñas dosis, siendo sus efectos peores cuanto más tiempo se lleve consumiendo o cuanta más cantidad se use, y extendiéndose sus consecuencias más allá del ámbito personal, al afectar también a la pareja, familia y amigos. Al ser una sustancia estimulante provoca en el consumidor una euforia rápida y momentánea, acompañada de una ficticia sensación de bienestar e hipervigilancia, que hace que el sujeto se muestre más enérgico y experimente una disminución del apetito y de la necesidad de dormir, a consecuencia de la estimulación química de las vías dopaminérgicas de los centros del placer del cerebro, a la vez que se inhiben los centros de la autoregulación, por lo que es más fácil presentar conductas desinhibidas, que pueden llegar a poner en riesgo la propia vida del consumidor, o la de otros si por ejemplo conduce un vehículo bajo los efectos de la droga.
Fuente: https://www.webconsultas.com/mente-y-emociones/adicciones/adiccion-la-cocaina