28 de agosto del 2023
https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/tobacco
La epidemia de tabaquismo es una de las mayores amenazas para la salud pública que ha tenido que afrontar el mundo. Causa más de 8 millones de muertes al año en todo el mundo. Más de 7 millones de estas defunciones se deben al consumo directo de tabaco y alrededor de 1,3 millones son consecuencia de la exposición de no fumadores al humo ajeno (1).
El consumo de tabaco es perjudicial en todas sus modalidades y no existe un nivel seguro de exposición al tabaco. Fumar cigarrillos es la forma de consumir tabaco más extendida en todo el mundo. Otros productos de tabaco son: el tabaco para pipa de agua o narguile, los cigarros, los puritos, el tabaco calentado, el tabaco de liar, el tabaco picado, los bidis y los kreteks, y productos de tabaco sin humo.
Alrededor del 80 por ciento de los 1 300 millones de personas que consumen tabaco viven en países de ingresos medianos o bajos (2), donde la carga de morbimortalidad asociada a este producto es más alta. El tabaquismo aumenta la pobreza porque los hogares gastan en tabaco un dinero que podrían dedicar a necesidades básicas como la alimentación y la vivienda. Este comportamiento de gasto es difícil de frenar porque el tabaco es muy adictivo.
El consumo de tabaco tiene un costo económico enorme en el que se incluyen los elevados costos sanitarios de tratar las enfermedades que causa y la pérdida de capital humano a causa de su morbimortalidad.
Una buena vigilancia permite hacer un seguimiento del alcance y el carácter de la epidemia de tabaquismo e indica la mejor manera de adaptar las políticas. A casi la mitad de la población mundial se le pregunta periódicamente sobre su consumo de tabaco en encuestas representativas a nivel nacional entre adultos y adolescentes.
Más información sobre la vigilancia del consumo de tabaco (en inglés)
El humo ajeno es el humo que llena restaurantes, oficinas, hogares u otros espacios cerrados cuando las personas fuman productos de tabaco. No existe un nivel seguro de exposición al humo de tabaco ajeno. El humo ajeno causa enfermedades cardiovasculares y respiratorias graves, incluidas cardiopatías isquémicas y cáncer de pulmón, y mata prematuramente a alrededor de 1,3 millones de personas cada año.
Más de una cuarta parte de la población mundial que vive en 74 países está protegida por legislación antitabaco integral a nivel nacional.
Más información sobre el humo ajeno (en inglés)
La mayoría de los consumidores de tabaco que son conscientes de los peligros del tabaco quieren dejarlo. El asesoramiento y la medicación pueden duplicar con creces las probabilidades de éxito de abandonar el tabaco.
Solo en 32 países, lo que representa alrededor de un tercio de la población mundial, existen servicios nacionales integrales para ayudar a los consumidores de tabaco a dejar de fumar con cobertura total o parcial de los costos.
Más información sobre cómo dejar de fumar (en inglés)
Las impactantes campañas contra el tabaco en los medios de comunicación y las advertencias sanitarias gráficas impiden que los niños y otros grupos vulnerables comiencen a consumir tabaco y aumentan el número de consumidores de tabaco que dejan de fumar.
Más de la mitad de la población mundial vive en los 103 países que siguen las mejores prácticas en materia de advertencias sanitarias gráficas, que incluyen, entre otros criterios, advertencias sanitarias gráficas de gran tamaño (es decir, cubren el 50 por ciento o más de las áreas principales del paquete) en el idioma local.
Mil quinientos millones de personas viven en los 36 países que han lanzado al menos una campaña fuerte contra el tabaco en los medios de comunicación en los dos últimos años.
Más información sobre las advertencias sanitarias contra el tabaco (en inglés)
La publicidad, promoción y patrocinio del tabaco incrementan y mantienen el consumo de tabaco al atraer eficazmente a nuevos consumidores de tabaco y desalentar a los consumidores de tabaco de dejar de fumar.
Un tercio de los países (66), que representan una cuarta parte de la población mundial, han prohibido completamente todas las formas de publicidad, promoción y patrocinio del tabaco.
Más información sobre las prohibiciones de la publicidad del tabaco (en inglés)
Los impuestos al tabaco son el medio más costoeficaz de reducir el consumo de tabaco, sobre todo entre los jóvenes y los grupos de bajos ingresos. Un incremento de los impuestos que suponga un 10 por ciento de aumento en el precio del tabaco reduce el consumo de tabaco en aproximadamente un 4 por ciento en los países de ingresos altos y en cerca de un 5 por ciento en los países de ingresos medianos y bajos.
Aun así, los impuestos elevados al tabaco rara vez se aplican. Solo 41 países, que representan el 12 por ciento de la población mundial, han introducido impuestos a los productos de tabaco, que equivalen a por lo menos el 75 por ciento del precio de venta al por menor.
Más información sobre los impuestos al tabaco (en inglés)
El comercio ilícito de productos de tabaco plantea importantes problemas de salud, económicos y de seguridad en todo el mundo. Se estima que uno de cada diez cigarrillos y productos de tabaco consumidos a nivel mundial proviene del comercio ilícito.
La experiencia de muchos países demuestra que el comercio ilícito puede abordarse con éxito incluso cuando se aumentan los impuestos y los precios del tabaco, lo que da lugar a un aumento de los ingresos fiscales y una reducción del consumo de tabaco.
El Protocolo para la Eliminación del Comercio Ilícito de Productos de Tabaco del CMCT de la OMS es la política clave en lo que concierne a la oferta para reducir el consumo de tabaco y sus consecuencias sanitarias y económicas.
Más información sobre la eliminación del comercio ilícito de productos de tabaco
Los productos de tabaco calentado son productos de tabaco que generan aerosoles que contienen nicotina y otras sustancias tóxicas al calentar el tabaco o activar un dispositivo que lo contiene. Estos aerosoles, que suelen ser aromatizados, contienen nicotina —una sustancia muy adictiva— y aditivos no contenidos en el tabaco.
A pesar de las afirmaciones de «reducción del riesgo», no hay indicios que demuestren que los productos de tabaco calentados sean menos dañinos que los productos de tabaco convencionales. Muchas sustancias tóxicas del humo de tabaco se encuentran en niveles considerablemente más bajos en los aerosoles de los productos de tabaco calentados, pero estos contienen otras sustancias tóxicas que se encuentran a veces en niveles más altos que en el humo de tabaco, como el glicidol, la piridina, el trisulfuro de dimetilo, la acetoína y el metilglioxal.
Además, algunas sustancias tóxicas que se encuentran en los aerosoles de los productos de tabaco calentado no se encuentran en el humo del cigarrillo convencional y pueden tener efectos asociados para la salud. Asimismo, estos productos son muy variables y algunas de las sustancias tóxicas que se encuentran en las emisiones de estos productos son carcinógenos.
Más información sobre los productos de tabaco calentado
Los cigarrillos electrónicos son la forma más común de sistemas electrónicos de administración de nicotina (SEAN) y sistemas electrónicos sin nicotina (SESN), pero hay otros, como los cigarros y las pipas electrónicos. Los SEAN contienen cantidades variables de nicotina y emisiones nocivas. El uso de productos con SEAN y SESN se conoce coloquialmente como «vapeo». Sin embargo, esto no significa que sean inofensivos o emitan vapor de agua.
Las emisiones de cigarrillos electrónicos generalmente contienen nicotina y otras sustancias tóxicas que son dañinas para los usuarios y no usuarios que están expuestos a los aerosoles ajenos. Se ha comprobado que algunos productos que dicen estar libres de nicotina contienen nicotina.
Las evidencias revelan que estos productos son perjudiciales para la salud y no son seguros. Con todo, es demasiado pronto para ofrecer una respuesta clara sobre los efectos a largo plazo de su uso o la exposición a ellos. Algunos estudios recientes sugieren que el uso de SEAN puede aumentar el riesgo de cardiopatía y afecciones pulmonares. La exposición a la nicotina en mujeres embarazadas puede tener consecuencias negativas para la salud del feto, y la nicotina, que es una sustancia altamente adictiva, es perjudicial para el desarrollo del cerebro.
Más información sobre los cigarrillos electrónicos
Las bolsas de nicotina son bolsas en porciones que contienen nicotina y son similares a los productos de tabaco sin humo tradicionales, como el snus, en algunos aspectos, incluida la apariencia, la inclusión de nicotina y la forma de uso (se colocan entre la encía y el labio). A menudo se promocionan como productos «sin tabaco», que se pueden usar en cualquier lugar y en algunas jurisdicciones, como los Estados Unidos, se las denomina «bolsas blancas».
Existe un conflicto fundamental e irreconciliable entre los intereses de la industria tabacalera y los intereses de las políticas de salud pública. La industria tabacalera produce y promueve un producto que, tal como se ha demostrado científicamente, es adictivo, provoca enfermedades y muertes y da lugar a una variedad de males sociales, incluido el aumento de la pobreza.
La magnitud de la tragedia humana y económica causada por el tabaco es enorme, y también prevenible. La industria tabacalera hace lo posible por ocultar los peligros de sus productos, pero nosotros estamos contraatacando.
El CMCT de la OMS es un hito en la promoción de la salud pública. Es un tratado basado en pruebas científicas que reafirma el derecho de todas las personas a gozar del grado máximo de salud que se pueda lograr, incorpora una dimensión jurídica en la cooperación internacional en materia de salud y establece normas estrictas de cumplimiento. Desde su entrada en vigor en 2005, se han adherido 182 Partes que representan más del 90 por ciento de la población mundial.
En 2007, la OMS introdujo una iniciativa práctica y costoeficaz de intensificar la aplicación de las disposiciones en materia de reducción de la demanda establecidas en el CMCT de la OMS: el denominado plan de medidas MPOWER.
Estas son las seis medidas MPOWER:
La OMS hace un seguimiento desde 2007 de las medidas aplicadas bajo el enfoque MPOWER. En la serie de informes de la OMS sobre la epidemia mundial de tabaquismo se explican pormenorizadamente los progresos logrados para combatir el tabaquismo a nivel mundial, regional y nacional.