07 de agosto del 2023
texas.gov
El fentanilo es un potente opioide sintético hasta 50 veces más fuerte que la heroína y 100 veces más fuerte que la morfina. Una dosis de solo 2 miligramos de fentanilo, que equivalen a entre 10 y 15 granos de sal de mesa, se considera que es letal.
El fentanilo fabricado ilegalmente suele combinarse con otras sustancias como pastillas falsificadas, heroína, cocaína y metanfetamina. Por eso, muchas personas pueden no saber que están ingiriendo fentanilo, lo que provoca una intoxicación accidental.
Según la Administración para el Control de Drogas (DEA), las redes criminales de narcotraficantes están produciendo en masa pastillas de imitación, que comercializan falsamente como pastillas legítimas de prescripción médica, causando así la muerte a texanos desprevenidos. Algunas pastillas falsificadas se fabrican para que parezcan opioides de receta médica, como la oxicodona (Oxycontin, Percocet), la hidrocodona (Vicodin) y el alprazolam (Xanax), o estimulantes como las anfetaminas (Adderall). Pastillas que imitan a las de venta con receta y que son muy accesibles al público pueden contener dosis mortales de fentanilo. A menudo se venden a través de las redes sociales y en plataformas de comercio electrónico, de modo que cualquiera que tenga un teléfono celular, incluidos los adolescentes y adultos jóvenes, puede adquirirlas. Los texanos solo deben consumir productos farmacéuticos legítimos que estén recetados por profesionales médicos y surtidos por farmacéuticos en los Estados Unidos.