20 de julio del 2023
Guadalsalus, centro de desintoxicación.
¿Qué provoca la adicción a los medicamentos?
Una persona que consume fármacos de manera diferente a como está prescrito por el médico tiene probabilidades de sufrir adicción a los medicamentos. Nos referimos a ingerirlos en una dosis más elevada de la sugerida, administrarla por una vía diferente, tomar medicamentos sin ser necesarios o combinarlos con otras sustancias.
Las razones que llevan a alguien a consumir fármacos de forma abusiva pueden ser:
- Relajarse o aliviar tensiones.
- Experimentar los efectos que provoca la ingesta de la sustancia.
- Drogarse.
- Intentar mejorar la concentración en una situación académica o laboral.
- Sentirse aceptado en el grupo social.
- Prevenir la abstinencia.
Tipos medicamentos: adicción a las benzodiacepinas, opioides y estimulantes
Los tipos de medicamentos que podemos incluir entre los más comunes por su uso abusivo son:
- Depresores. También conocidos como tranquilizantes o sedantes, se recetan para tratar la ansiedad o problemas de sueño. Esta adicción a las benzodiacepinas, barbitúricos y otros medicamentos provoca problemas de memoria, falta de coordinación y menor periodo de atención, entre otros síntomas.
- Opioides. Se consideran analgésicos destinados normalmente para tratar el dolor tras una operación. Si una persona consume opioides con intención de drogarse, puede tener efectos negativos como debilidad, somnolencia o confusión, entre otros.
- Estimulantes. Medicamentos recetados para tratar problemas como la obesidad, narcolepsia o déficit de atención e hiperactividad, que estimulan el cerebro y el cuerpo. Su consumo como droga puede ocasionar pérdida de memoria, alucinaciones o problemas cardíacos, entre otros efectos.
Consecuencias de la adicción a los medicamentos
Los efectos de la adicción a los medicamentos comprenden factores de riesgo como:
- Problemas cardíacos.
- Presión arterial alta.
- Síntomas de abstinencia que incluye hiperactividad en el sistema nervioso y convulsiones si se intenta dejar de golpe.
- Alucinaciones, agresividad y paranoia.
- Dependencia física a un medicamento que aumente la necesidad de una dosis más alta para conseguir los mismos efectos.
- Muerte por sobredosis.
- Comportamiento diferente a cómo lo haría si no estuviera bajo los efectos de la adicción.