16 de enero del 2023

Instituto Europeo

Cada 31 de mayo se celebra el Día Mundial Sin Tabaco para informar sobre los peligros que supone su consumo y tratar así de concienciar a la población en busca de una sociedad más sana.

Se estima que existen unos 1.300 millones de personas en el mundo que fuman. Parece ser una tendencia que disminuye con los años, tal vez por la mayor concienciación sobre la importancia de llevar una vida saludable. Pero siguen siendo unos datos importantes a considerar.

De acuerdo con las estadísticas, por primera vez, el número de varones que consumen tabaco ha disminuido “en más de 1 millón de usuarios masculinos menos”. Asimismo, es interesante destacar la gran diferencia existente entre el consumo a nivel mundial por sexos. Frente a unos 1.000 millones de hombres, los datos entre los usuarios femeninos permanecen superiores a los 230 millones.

• El primer europeo que prueba el humo del tabaco es Rodrigo de Jerez, un acompañante de Colón en las américas. Le agrada tanto esta hoja que la transporta a su tierra natal. Los vecinos aterrados dan la voz a la Santa Inquisición que determina que “Sólo Satanás puede conferir al hombre la facultad de expulsar humo por la boca”. Como consecuencia pasó varios años en prisión (Langer,  2018).
• Los españoles que evangelizaron América creían que había una conexión diabólica con el tabaco y que los indígenas habían pactado con el mismo Demonio para obtener las almas de los “hombres blancos” (Langer, 2018).
• El humo que se produce al consumir tabaco, tiene más de 4000 químicos. De estos, “al menos 250 son nocivos, y más de 50 causan cáncer”. Además, el fumar y estar expuesto al humo figuran como una de las principales causas de las enfermedades cardíacas (National Geographic, 2019).
• Cada año, el tabaquismo pasivo es el responsable de una de cada diez muertes relacionadas con el tabaco (OMS, 2009).
• Más de 8 millones de personas fallecen cada año a causa del tabaco. De estos fallecimientos, más de 7 millones eran consumidores de tabaco, el resto eran fumadores pasivos (OMS, 2019).
• Fumar tabaco en cualquiera de sus formas es igual de perjudicial para la salud. No hay forma segura de consumirlo. La manera más común es con los cigarrillos, pero también son habituales el tabaco de pipa, los puros o el tabaco de liar.