11 de enero del 2023

Psicología y Online

El consumo de azúcar activa centros de búsqueda radicados en el cerebro que provocan que consumamos en exceso alimentos sobrecargados en azúcar. Esta clase de alimentos generan la liberación de sustancias denominadas oxitocina y dopamina, asociadas a sensaciones placenteras.

Algunos síntomas de está adicción son:

• Antojos referidos a alimentos dulces.
• Pensamientos recurrentes acerca de consumir alimentos con azúcar.
• Dolores de cabeza.
• Irritabilidad.
• Nerviosismo.
• Ansiedad. 

Causas

El análisis de las causas que inciden en la adicción al azúcar resulta crucial para situar métodos adecuados que sean de utilidad para cada persona. 

• Factores ambientales. En muchas ocasiones, la imitación de comportamientos corresponde a un rasgo característico de las personas adictas al azúcar. De esta forma, es posible que se haya observado a alguien con ciertas conductas adictivas sobre alimentos u otros elementos, adoptando este patrón en su vida cotidiana.
• Estímulos sociales. Otra de las causas de la adicción al azúcar es la influencia de los medios de comunicación. Estos influyen en las decisiones de las personas mediante distintas publicidades asociadas al consumo. Bajo estas circunstancias, las imágenes de alimentos sobrecargados en azúcar presentan un atractivo visual para el consumidor que tiene como finalidad que se ingieran estos alimentos que son difíciles de controlar.

Consecuencias

El consumo en exceso de alimentos ultraprocesados con azúcar traen una serie de consecuencias directas sobre la salud de las personas.

• Obesidad.
• Diabetes tipo II.
• Infartos.
• Hipertensión.
• Aterosclerosis.
• Enfermedades cardiovasculares.
• Síndrome metabólico.
• Agravamiento de trastornos mentales tales como depresión y ansiedad.
• Alteraciones en la capacidad de aprendizaje y memoria. 
• Aumento de peso.

Tratamiento

• Terapia psicológica. Ayuda a la persona a comprender sus emociones, comportamientos y pensamientos acerca de situaciones que le generan un conflicto. Por un lado, las terapias de larga duración orientan su objetivo en entender el motivo que ha originado una conducta peligrosa para una persona. Por otro lado, las terapias de corta duración brindan herramientas al paciente para que cuente con otros recursos a la hora de afrontar situaciones que le generan ansiedad, estrés, angustia y/o otro sentimiento. 
• Tratamiento nutricional. Debido a que el consumo de azúcar está relacionado con malos hábitos alimenticios, la visita a un nutricionista puede orientar a la persona que padece esta adicción a reorganizar su alimentación e incorporar alimentos más saludables.
• Tratamiento psiquiátrico. A veces es necesario realizar una consulta psiquiátrica, dado que existen ciertos circuitos neuronales en el cerebro que inciden en el consumo excesivo del azúcar. La ingesta de medicación siempre debe estar guiada por un profesional de la salud mental.