25 de agosto del 2022
NIH
Las personas con trastorno de pánico tienen ataques repentinos y frecuentes. Estos ataques se caracterizan por una ola repentina de temor o incomodidad, o bien, una sensación de perder el control, incluso cuando no hay un peligro real o un factor desencadenante claro.
Las personas con trastorno de pánico pueden tener:
A veces, el trastorno de pánico podría ser hereditario, pero nadie sabe con seguridad por qué algunos miembros de una familia lo tienen y otros no. Los investigadores han descubierto que varias partes del cerebro y ciertos procesos biológicos pueden desempeñar un papel fundamental en el temor y la ansiedad.
Si tiene síntomas de este trastorno, hable con su médico u otro proveedor de atención médica. Después de conversar sobre su historial clínico, es posible que le hagan un examen físico para asegurarse de que no tenga algún problema físico no relacionado que le esté causando estos síntomas.
Con frecuencia, se usa la terapia cognitivo-conductual, un tipo de psicoterapia respaldada por investigaciones, para tratar el trastorno de pánico.
Los médicos y otros proveedores de atención médica también pueden recetar medicamentos que ayudan a tratar el trastorno de pánico. Hay diferentes tipos de medicamentos que pueden ser eficaces para tratar este trastorno, entre estos:
lINK: https://www.nimh.nih.gov/health/publications/espanol/trastorno-de-panico-cuando-el-miedo-agobia#:~:text=%C2%BFQu%C3%A9%20es%20el%20trastorno%20de,o%20un%20factor%20desencadenante%20claro.