Creando estilos de vida sanos

“Me veía deforme, si no hacía 700 abdominales por día sentía que no estaba marcada”

 “Se llama vigorexia y me llegó a afectar mucho”, indicó y continuó: “Es como la anorexia, pero me veía deforme. "Tenía un problema con mi cuerpo y me afectó mucho".

"Tenía tanta fijación con el cuerpo, por ejemplo con los abdominales, que hacía 700 por día. Pero lo peor era que si en vez de 700 hacía 699, me moría por llegar a los 700. Si no los hacía, me veía que no estaba marcada", se sinceró quien reconoció que por ese entonces llegó a pedirle las llaves del gimnasio al dueño del local para poder ir a entrenar los domingos. 

Fue su amigo –y ex compañero del Bailando- Gabo Usandivaras quien notó la obsesión de Cinthia por el entrenamiento y se lo hizo saber para poder ayudarla a salir adelante. “Me dijo ‘estás entrenando mucho Cinthia, a vos te pasa algo’”, recordó y agregó: “Las flacas también sufren”.

Luego de superar el trastorno, Cinthia continuó entrenando de manera moderada y siguiendo una rutina saludable. Según muestra a través de sus redes sociales, construyó un gimnasio en su casa y allí comparte videos de los ejercicios que realiza.