02 de January del 2014
Hartos de la implacable violencia de los carteles de las drogas, grupos de civiles tomaron las armas en 2013 en zonas rurales de México. Buscan poner fin a la espiral de muertes al que contribuyen gánsteres y políticos corruptos.
Muchas voces en América Latina advirtieron sobre el fracaso de políticas puramente represivas contra el narcotráfico. En el sur del continente, Uruguay cambió de estrategia y legalizó la producción y venta de la marihuana.
A escala mundial, el consumo de nuevas drogas de diseño aumenta de forma galopante entre los jóvenes. Solo en el sureste de Asia fue incautada la cifra récord de 227 millones de pastillas de metanfetamina en el 2012 (59% más que el 2011), según cifras de la ONU.
La incapacidad o falta de voluntad de la Policía mexicana para detener a las bandas impulsó a agricultores que viven en las montañas de los estados de Guerrero (sur) y Michoacán (oeste) a organizarse en grupos armados que denominaron 'autodefensas'.
Ante el aumento de los disturbios en Michoacán en mayo, el presidente Enrique Peña Nieto desplegó miles de soldados en ese estado, continuando con la política de Calderón de utilizar al ejército para reprimir a los narcotraficantes. Pero las 'autodefensas', que luchan contra el cartel pseudorreligioso de Los Caballeros Templarios, han prometido continuar con su expansión, sin hacer caso de las advertencias del Gobierno.
Hasta ahora, Uruguay es el país que ha dado el paso más audaz con la aprobación final este mes en el Senado de un proyecto de ley que autoriza la producción, distribución y venta de cannabis bajo control estatal. El replanteamiento sobre la guerra contra las drogas ha llegado a Marruecos, donde los legisladores iniciaron la semana pasada un debate sin precedentes sobre la legalización del cannabis para fines médicos e industriales.
El papa Francisco intervino en la discusión durante una visita a Brasil en julio, cuando dijo que " no es la liberalización del consumo de drogas (...) lo que podrá reducir la propagación y la influencia de la dependencia química. Es preciso afrontar los problemas que están en la base del consumo " .
Un estudio del experto Evan Wood, de la Iniciativa de Investigación en Salud Urbana de Vancouver, Canadá, llegó a la conclusión de que la guerra global contra la heroína, la cocaína y el cannabis ha fracasado en frenar la oferta, debido a que los precios de la droga se han desplomado y los ataques han aumentado.
Los adeptos a la marihuana en Washington y Colorado se preparan para que el 1 de enero ambos estados se conviertan en los primeros de Estados Unidos que venderán la planta con fines recreativos en tiendas de cannabis. Muchos activistas comparan la entrada en vigor de esta normativa con el fin de la ley seca en la década de los 20 del siglo pasado.
Tanto en Colorado como en Washington, todo aquel mayor de 21 años podrá a partir del miércoles ir a una tienda y comprar una bolsita de 'hierba'.
Hasta la fecha, 20 estados permiten el consumo de marihuana por motivos médicos, pero la legislación que entra en vigor el 1 de enero convierte a Colorado y Washington en los únicos lugares del mundo donde la marihuana de calidad es asequible de forma legal al público en general.
Los medios locales apuntan que "es de esperarse" que otros estados, incluido el más poblado del país, California, sigan este ejemplo en los próximos años. Los cálculos anticipan que este negocio crecerá en un 64% en el 2014.
Dos de cada tres uruguayos rechaza la ley aprobada este mes en su país que regula el mercado de marihuana, según una encuesta conocida el sábado en Montevideo.
Por edades, el rechazo es amplio entre los mayores de 30 años y solo entre los jóvenes hay opiniones divididas (el 43% a favor y el 45% en contra).
En EE.UU., un sondeo de la firma Gallup halló que un 58% de ciudadanos consideraba que la droga debe ser legalizada.