10 de July del 2019
Anónimo
Estás más pendiente de los números que de cómo te sientes
Cuando se trata de actividad física, es común estar más atentos a la cantidad que a la calidad. No es inusual mirar la balanza, medir tu cintura o contar calorías, pero estos dígitos no indican la calidad del ejercicio, ni tampoco son una manera de pensar sostenible.
En lugar de contemplar constantemente la balanza o en el peso, vigila cómo te sientes. ¿Eres más fuerte? ¿Eres capaz de hacerlo mejor que ayer? Eso es lo importante.
Vas al gimnasio todos los días, algunas veces más de una vez al día.
Simplemente no es realista esperar entrenar todos los días. Y si estás en el gimnasio todos los días, entonces no estás haciendo algo saludable para tu cuerpo.
El sobreentrenamiento no es una buena idea por muchas razones. No solo te quita el tiempo tan necesario para las otras tareas, sino que también físicamente poco saludable.
Según Shape, tus músculos crecen cuando descansas, por lo tanto, mejora tus entrenamientos fuera del gimnasio. La revista también explicó que si vas al gimnasio todos los días se pueden provocar cambios de humor, problemas menstruales y agotamiento.
Solo piensas en ir al gimnasio
Una de las maneras más fáciles de saber si algo es una obsesión es controlar el proceso de pensamiento que lo rodea. Si tu pensamiento se vuelve constante, es cuando es el momento de evaluar si está gobernando tu vida o no.
De acuerdo con Psychology Today, una vez que su concentración en el gimnasio (o cualquier otra cosa) comienza a obstaculizar, distraer o hacer que ignores tareas necesarias y saludables, es cuando se convierte en una obsesión preocupante.
Asegúrate de mantenerte enfocado en cosas fuera del gimnasio, especialmente teniendo en cuenta que el gimnasio en sí no siempre es la clave para un estilo de vida saludable.
Fuente: https://www.eonline.com/mx/news/990137/5-senales-de-que-eres-adicto-al-ejercicio